La mayoría
coincide en que somos seres espirituales viviendo una experiencia terrenal,
algo que ya luce gastado. Otros aseguran que no somos más que lo que se ve a
simple vista, animales domésticos racionales, no creen en espíritus ni
encarnaciones ni nada parecido. Un grupo más selecto cree que somos hechos a
imagen del Dios creador a la perfección y que somos dioses también.
Un grupo
quizás más reducido a nivel mundial está consciente de que somos seres de luz, energía,
no porque se lo hayan dicho, si no porque lo han experimentado y comprobado internamente,
pero no solo la luz de la energía que realmente somos, sino una luz más
brillante, divina y auténtica, tan deslumbrante y poderosa como el sol, tan
sabia como el cosmos y con un ingrediente muy especial, el poder de la mente y del
pensamiento, que controlado y usado a nuestro favor nos convierte en seres
superiores, espectaculares, capaces de transformarlo todo tan solo con un
pensamiento y capaces de crear su realidad y trascender, en este grupo me
incluyo también por experiencia propia.
Ahora bien
si somos energía, seres de luz, poderosos, superiores y especiales, me pregunto:
¿Por qué tenemos que venir a este planeta a vivir tantas vidas como sean
necesarias para evolucionar? ¿Por qué vivimos vidas simultáneas o alternas?
¿Por qué la necesidad de aprender si deberíamos saberlo todo? ¿Por qué la
necesidad de experimentar tantas situaciones y desempeñar tantos personajes
diferentes? ¿Por qué si somos uno y estamos conectados existen tantas
jerarquías y niveles de consciencia y evolución? ¿Para qué realmente nos
estamos preparando y entrenando tan ardua y sofisticadamente?
Para algo
muy grande debe de ser, al parecer nos estamos preparando para ser los maestros
de los súper maestros de los maestros (parece un trabalenguas), o tal vez para
ser los jueces supremos del universo, o puede que las encarnaciones sean la
forma de diversión más usada por los espíritus para entretener el alma, quizás
somos parte de una gran competencia galáctica o un sustancioso concurso
universal de cuentos y de historietas, o será que…, de momento me conformo con
saber y asegurar que mientras sea capaz de criticar y juzgar la conducta de un
ser humano con ligereza y crueldad sin haber vivido su experiencia, estaré
ganándome pasajes de encarnaciones gratis, para vivir su experiencia y ver si
fui justa o no en mi manera de juzgarlo.
Cada vez
que censuro o condeno a alguien con mis juicios me gano una nueva vida en el
planeta, así lo visualicé y entendí en un pensamiento que me llegó como una ráfaga
de luz en forma de reflexión. Después de recibir esa revelación no me queda más
que exhortarles a ser muy cuidadosos a la hora de juzgar y desde ese día hacer
como mi Eco o mantra favorito la siguiente frase:
“Cualquier
actuación del ser humano es perfecta porque lo lleva a alcanzar su iluminación”
“Cualquier
actuación del ser humano es perfecta porque lo lleva a alcanzar su iluminación”
“Cualquier
actuación del ser humano es perfecta porque lo lleva a alcanzar su iluminación”.
No puedo
juzgar al asesino hasta que no mate a una persona y sepa que se siente al
hacerlo (dicen que el espíritu se siente libre y que puede causar adicción), o
hasta que no me vea en la necesidad de matar y decida no hacerlo o dar mi vida antes
que convertirme en asesina, entonces si podré hablar con propiedad de mi
experiencia de vida en ese aspecto.
Siempre
que alguien me dice que soy una buena persona lo desmiento y digo que no lo soy
porque no me he visto en la necesidad de ser mala, la vida ha sido generosa
conmigo, si me hubiera visto en la necesidad de robar, matar y descarrilarme para
subsistir no sé si lo hubiera hecho, así que solo me he mantenido al margen de
la maldad, no me he revolcado en ella, o quizás me revolqué tanto en ella en otras
vidas que por fin he podido mantenerla al margen, esa también es una
posibilidad, la cosa es que somos todos los personajes, los malos, los
regulares, los buenos y los excelentes, si no lo hemos sido lo seremos antes de
nuestra última encarnación, luego de probar suerte, el libre albedrio te
permitirá decidir cual papel te gusta más y escoges por identidad.
Este otro
Eco también puede resultar muy efectivo para no salir agraciado con otro pasaje
de vida en el planeta:
“El que no juzga, tampoco será juzgado”
“El que no juzga, tampoco será juzgado”
“El que no juzga, tampoco será juzgado”
Pedimos excusas si alguna imagen usada tiene derecho de autor, al avisarnos la retiraremos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
VALORAMOS Y AGRADECEMOS TUS HUELLAS.