viernes, 16 de abril de 2021

Abran las celdas

Todos, o la mayoría de los seres humanos, en algún momento de nuestra vida nos damos cuenta de que fuimos encarcelando emociones, enterrando vivas situaciones dolorosas y ofensivas, negándonos a enfrentar y curar heridas a las que les prohibimos sangrar, para aparentar que no nos habían dañado o habían cicatrizado de inmediato, pero lo único que logramos con esto, fue ahondar más su llaga infecciosa, adentrándonos en un mundo de odios, resentimientos y rencores venenosos, que definitivamente terminaron carcomiéndonos por dentro.

Al avanzar los días y años sin buscar soluciones a estos encierros traumáticos, empiezan a aflorar otras dolencias, físicas y psíquicas, por lo que debemos ir abriendo celdas, desenterrar las ofensas y permitir que la sangre corra, para sacar toda esa purulencia, para limpiar y desinfectar las heridas y dejar ser a las emociones retenidas, reconocerlas, sentirlas a flor de piel, y digerirlas, para así dejarlas ir y devolverles su libertad.

Ilustración de Christian Schloe
Ilustración de Christian Schloe

Cada emoción es como una paloma mensajera que viene a visitarte y a traerte un mensaje importante, si la encierras en tu interior, y no le permites regresar, entonces la habrás secuestrado, y con esa actitud, también te auto secuestras, y con cada paloma que encarceles, también estáencarcelando una parte de ti. 

Cuando esas partes se sigan sumando y ya no soportes ese constante revoloteo de las palomas por salir, y te golpeen tan fuerte que sientas que ya no puedes más, sentirás un enorme vacío e inconformidad que te llevará a reflexionar y a buscar en tu interior las razones para sentirte así. 
Al hacerlo a profundidad y con completa sinceridad y amor a tu persona, descubres una belleza en cada episodio vivido, que te había pasado inadvertida, es ahí cuando empiezas tu camino hacia el verdadero propósito de tu vida, es entonces cuando se te hace la luz en medio de tanta oscuridad, y tus ojos adquieren un brillo diferente, luminoso, y tu corazón palpita en otra frecuencia porque empiezas a amar la vida, y a darte cuenta que tu jardín interior florece.


Poco a poco irás notando que has cambiado, eres otra persona, amable, serena y feliz, iluminada por dentro, irradiando toda esa luz hacia afuera, y con un aura externa que transmite alegría y amor, y sin proponértelo rejuveneces, desprendes tantas alegrías que solo encontrarás sonrisas a tu alrededor, pues todos se volverán tu reflejo. 

Si estás leyendo esto y aun no estás en ese proceso de reconocimiento, no lo demores más, préstate toda la atención que mereces y no te reprimas, no te auto castigues, no te prives de amarte y amar, no te censures ni te vuelvas avaro de sentimientos…, muéstrate, exprésate, mímate y respétate, y más que todo, ámate con mucho amor y reconoce que eres la mayor expresión de amor que te rodea, nadie es capaz de amarte como solo puedes hacerlo tú. 

Abre las celdas que aún permanecen cerradas, cura tus heridas del corazón.


Quiero compartirles esta reflexión final, tomada del blog “El mundo de paz en nosotros”, pinchando el nombre pueden visitarlo y verla allí acompañada de sabias frases. 

Hay que sanar (Autor Desconocido)

Tuve que alejarme para sanar, porque eso hacemos los valientes, SANAR.
Sanar para no repetir los mismos errores.
Sanar para no matar mundos ajenos.
Sanar para no ensuciar otros corazones.
Sanar para no herir.
Sanar para no dar amor a medias.
Sanar para no ser conformista.
Sanar para darme cuenta que las flores crecen en los jardines y no en el desierto.
Sanar para no autodestruirme.
Sanar para limpiar mis adentros.
Y aunque mi garganta cargaba miles de nudos.
Y aunque creía casi imposible dejar viejas costumbres, quise sanar, porque eso hacemos los valientes.
¡Perdonar!
¡Soltar!
¡Amar!
¡Sanar!
Me falta mucho, el Universo sabe que todavía me falta, pero día a día voy quitando de mi piel aquello que me hizo sufrir.
Lo estoy haciendo
Lo hago
Sigo sanando por la persona más importante de mi vida.
¡Sigo sanando por Mí!  



I. Harolina Payano T. Fluyendo armoniosamente. 

Pedimos excusas si alguna imagen usada tiene derecho de autor, al avisarnos la retiraremos.

14 comentarios:

  1. Buen día, Idalia.

    Hoy me voy a quedar con la parte en la que expresas que hay que permitir que la sangre corra que es lo mismo que no huir de los duelos o de las daños recibidos. Ser conscientes de ello y saber procesar el dolor es una las claves para sanar de mejor manera y poder sacar lo mejor de nosotros mismos.

    Un marciano abrazo y bonito fin de semana.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Buenas noches Miguel

      Me alegra que te quedaras con esa parte tan importante y gracias por lo bien que expones el motivo para escogerla.

      Te dejo otro abrazo y mis deseos de que tengas una estupenda semana previa a los famosos Oscar...

      Borrar
  2. Mi querida Harolina, hoy al leer esta reflexión me quedo asombrada. Es como si la hubieras escrito para mí, me siento plenamente identificada de principio a fin. Hace años en el intento de mostrar fortaleza ante el mundo, ante las personas que me hirieron me forjé una coraza tan dura como una roca. Mis emociones quedaron atrapadas detrás de esa coraza hasta llegar el punto de no saber en qué emoción me encontraba. Sí, llegó ese punto, ese momento de reflexionar, de buscar dentro y hacer descubrimientos tales como la importancia de liberar esas palomas y reconocer y vivir las emociones porque dejarlas aprisionadas en la celda genera una auténtica enfermedad. Hay heridas que cuesta cerrar...es un trabajo constante y el amor hacia uno mismo es de vital importancia para conseguir el propósito y ver que finalmente no podemos pretender ser lo que no somos. No soy una roca, soy un ser humano lleno de defectos pero también virtudes, soy fuerte y al mismo tiempo me muevo por emociones y mostrarlas no significa ser débil sino humana, esto le aprendí con el tiempo. Hoy, como dice el precioso poema, sigo avanzando aunque me queda mucho camino por delante. Sigo sanando por mí, he descubierto lo que habita en mi interior y aprendo día a día a amarme y aceptarme tal y como soy, humanan imperfecta con mis defectos y mis virtudes...
    No he podido evitar dejarte esta parte tan personal al leer tu sabia reflexión. Gracias por hacerme recordar la importancia que tienen las emociones y saber liberarlas antes de que tenga efectos perniciosos sobre la salud física, mental y del alma.
    Te dejo un abrazo inmenso con todo mi cariño y gratitud. Que tengas un muy bonito fin de semana mi querida Harolina.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Marina, mil gracias por tu generosidad y por compartir tu propia experiencia, dando fe de lo expresado de manera muy personal, lo agradezco en el alma querida amiga, y me alegra que sintieras que fue escrito para ti, me hace sentir útil para alguien y que no escribo en la oscuridad.

      Una belleza de sinceridad y humildad tu comentario querida, vale lo impagable y aporta tanto a esta reflexión tu comentario reflexivo...

      Te dejo otro fuerte abrazo y mis mejores deseos para que tengas una grandiosa semana. Seguimos avanzando y sanando querida.

      Borrar
    2. Querida Harolina, puedes bien creerme de que no escribes en vano, seguro que hay más personas que te leen y sienten que la lectura les ayuda, como es mi caso.
      Alguien me dijo que no hay emociones negativas lo que pasa es que hay que aprender a gestionarlas y no me cansaré de repetir la importancia que tiene aprender a hacerlo desde la infancia, creo que debería ser una asignatura en la escuela.
      Mil gracias a ti de nuevo mi muy querida amiga.
      Abrazo gigante con todo mi cariño.

      Borrar
    3. Marina, gracias por esa generosidad que siempre exhibes y que es tu sello personal querida.

      Me gusta eso de que debería de impartirse en la escuela el aprender a gestionar las emociones, me digo lo mismo, es por ahí que debemos empezar a aprender en la vida.

      Otro gran abrazo para ti.

      Borrar
  3. Totalmente! Me he visto reflejada en años atrás, cuando por tapar tantas emociones y penas me dio mi primera crisis de ansiedad. Y es tal cual, cuando aceptas y te permites sanar es como que rejuveneces quw renaces y hasta los demás notan el cambio.

    Un placer leerte como siempre.
    Un abrazo gigante!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Hola Yolanda, muchas gracias por pasarte de nuevo y dejar tan claras huellas, dejando ver tu experiencia para apoyar lo expresado.

      Me alegra que hayas superado esa etapa, creo que de alguna manera, todos vivimos algo parecido, aunque no de la misma forma ni con la misma intensidad, lo importante es remediarlo a tiempo. Y si, al empezar a sanar, rejuvenecemos, renacemos y los demás lo notan, y sin saberlo, con nuestra ligereza álmica, los convidamos a hacer lo mismo...

      Gracias sinceras, te dejo otro fuerte abrazo.

      Borrar
  4. Detrás de esas heridas emocionales, o energía estancada en nuestro cuerpo, también hay problemas de salud, ya que cuerpo y espíritu forman un todo.
    Intuyo que se puede encontrar su origen en la falta de autoestima y la identificación con el ego, ya que semejante autoengaño no nos permite aceptar nuestros propios errores de los cuales derivan estas emociones dolorosas, culpando a los demás de lo que no somos capaces de asumir.
    Muy importante tener presente esta reflexión final, que dice mucho en favor del crecimiento personal.

    Un gran abrazo, querida amiga y que tengas un estupendo inicio de semana.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Estrella un gusto tu visita, muchas gracias por las huellas.

      Muy cierto eso de que esas emociones reprimidas estancan y bloquean el libre fluir de las energías y muchas veces son la causa de las enfermedades.

      Quizás la causa tenga muchas raíces indirectas, lo que habría que buscar y remediar es la raíz central, de la que se derivan las demás, provocando como dices, falta de autoestima o esa identificación con el ego... A menudo la raíz primera es tan profunda que cuesta hallarla y remediamos las periféricas, dejando a la principal hincando más hondo el alma.
      Cuesta mucho, pero una vez empecemos a hoyar, no hay vuelta atrás, en lo adelante es exprimir el absceso y sacar toda su purulencia, y dejar correr la sangre hasta que esté limpia y dejemos de sangrar.

      Muchas gracias amiga por tu siempre grata presencia. Recibe un fuerte abrazo.

      Borrar
  5. ¡Hola, Harolina! Sin duda que lo que no sale se queda dentro. Y los rencores, complejos, remordimientos y culpas son un lastre que si no soltamos terminan por carcomernos por dentro en forma de resentimientos o rumiaciones. No es fácil, como dices. Sacar "nuestra basura" puede tener consecuencias, pero la paz liberadora las compensará. Un fuerte abrazo!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. ¡Hola David!

      Muchas gracias por tu participación reflexiva y por el regalo de tu preciado tiempo, que hace más valiosa tu aportación.

      Espero que estes pasando bien el fin de semana. Te dejo otro fuerte abrazo.

      Borrar

VALORAMOS Y AGRADECEMOS TUS HUELLAS.