sábado, 22 de diciembre de 2018

Se acerca un nuevo año

Cada vez que se acerca un nuevo año, nos invaden tanto la nostalgia de lo que queda atrás, como la incertidumbre y expectativas de lo que vendrá, pero saben qué, si nos mueven estos enunciados enumerados en la imagen, nos preparamos a vivir un año especial y espectacular, seamos positivos.


Dicen que la risa es el canto del alma y que tanto las alegrías como las penas afloran ese canto, es solo que estamos adiestrados a creer que solo las alegrías hacen cantar el alma, pero también las tristezas lo hacen, y a veces hasta con mas fuerza para dejarse sentir más intensamente y así darnos cuenta de que estamos vivos y deseosos de experimentar y explorar. 

Antes de seguir quiero compartirles este texto extraído de La Palabra Diaria del día 15 de diciembre del corriente.

“Expreso mi libertad interna: yo soy una creación sin igual, y celebro mi ser único permitiendo que mi individualidad resplandezca. No existe nada que necesite hacer para reclamar mi libertad. Simplemente al ser yo mismo, soy libre para expresar quién soy. Al encontrar mi centro de aceptación interna, expreso la creación divina que soy: amada, con un corazón afable, con un espíritu radiante. Me valoro tal y como soy. Mi corazón está lleno de gratitud por todos mis dones y cualidades. Yo soy una creación de Dios: ¡creativa, expresiva, libre! Mi corazón ama, mis manos ayudan y mi mente imagina grandes cosas. ¡Valoro todos estos regalos únicos en mí y en los demás! La libertad se establece ahora como un estado verdadero de mi ser. ¡Yo soy un ser ilimitado y libre!"  

¿Que les ha parecido este decreto espiritual?, para mi es la mejor forma de iniciar el año. Me identifiqué mucho con su contenido. Por eso les exhorto a decretarlo, creerlo y sin lugar a dudas serán libres.


Pongámonos nuestro mejor traje, vistámonos de magia y esplendor, que una lluvia de estrellas nos empape y que la pureza de la luz y el amor incondicional sean nuestro estandarte y bandera en este 2019, manos a la obra. 
Dejemos atrás todo, las alegrías, los fracasos y las desilusiones, la vida nos deparará mas, son parte de nuestro crecimiento y transitar por la vida y la muerte; la vida cargada de sorpresas y la muerte plagada de misterios.

Que el espíritu libre e indomable que nos forja el carácter, al iniciar un nuevo año limpie y cure nuestras heridas, nos vista de valor, entusiasmo y pasión por vivir, y mas que todo, nos vista de esperanza, fe y amor. 


Las expectativas que nos forjamos cada año son muy importantes para llevar a cabo nuestras metas y la consecución de sus logros. Si elegimos sabiamente nos proporcionaremos un buen año, esto no significa que sea todo alegría, habrán lágrimas de dolor, que serán las que nos infundirán las fuerzas para seguir y nos mostrarán las lecciones que debemos aprender para continuar nuestro viaje, abandonar este plano y llegar al reencuentro, a la certeza de saber quienes somos y cual es nuestro verdadero propósito. 

Amables lectores y amigos, gracias por su atención y apoyo, les deseo un año 2019 cargado de emociones intensas, lucidez mental y salud corporal, y un crecimiento espiritual a la altura de vuestras necesidades. 

La vida es un suspiro, un parpadear, que puede ser tan gratificante como lo sientas y disfrutes, o tan traumático como lo pienses y lo sufras. 


El nuevo año está en blanco, crea tu mejor obra de arte en el, y séllala con tu verdadera identidad divina, dejando salir ese torrente de amor que hay en ti y desbordándolo por doquier.

¡Es tu elección, solo tú puedes hacer una mejor versión de ti! 
¡SIGUE CAMINANDO!

¡ALEGRES FIESTAS Y  FELIZ INICIO DE AÑO!

I. Harolina Payano T. Fluyendo armoniosamente. 

Esta entrada fue publicada en el periódico El Caribe:
https://www.elcaribe.com.do/2018/12/29/opiniones/correo-de-los-lectores/se-acerca-un-nuevo-ano/

Pedimos excusas si alguna imagen usada tiene derecho de autor, al avisarnos la retiraremos.

lunes, 17 de diciembre de 2018

Las emociones

Una pregunta que surge cuando pensamos en el cúmulo de emociones que se agolpan a lo largo de nuestro día a día, y de la vida, es la siguiente:

¿En realidad las diferentes emociones que sentimos, se turnan, sea pelean, se ponen de acuerdo o se dan soporte unas a otras para mantener la armonía y el equilibrio emocional?

La película “Inside out”, conocida en español como “Intensamente”, es muy apropiada para respondernos esta pregunta, vislumbrando como seria en realidad el funcionamiento interno de nuestras emociones, y como la alegría lucha para mantenerse activa y sobrevivir ante cada situación caótica y triste, tratando de inyectarnos alegría de vivir, hasta darse cuenta de que la tristeza mas que su oponente, es su mejor aliada. 


La mezcla de emociones y sensaciones que vivimos en un solo día, podría ser tan inquietante y perturbadora como reconfortante y aleccionadora. Como bien dice el dicho, “No todo es color de rosa”, y a pesar de su belleza, tienen espinas que hieren, pero gracias a ellas, existen y son mas hermosas y respetadas. 

Lo mismo pasa con las emociones, al igual que el rosal, tienen espinas, no todas son aroma, delicadeza y belleza, la tristeza que causan los sentimientos hirientes, es tan necesaria como la alegría, ambas emociones coexisten en armonía y van de la mano, apoyándose mutuamente y dejando espacio a muchas otras mas que también son imprescindibles. Cada una por separado tiene su momento de brillar, pero luego de su debido reconocimiento, deben acoplarse con las demás.


Las emociones son manifestaciones físicas, se perciben, se sienten, se asientan temporalmente y se expresan, cumplida su verdadera función, se disipan y disuelven junto a otros Estados del Ser, para dar lugar a un estado de armonía, felicidad y gozo interior, que se hace presente en el exterior, en el entorno nuestro, ofreciendo una agradable sensación de bienestar general, donde todo se percibe con serenidad, gratitud y amor existencial.

Emociones como las que nos deja ver la película citada anteriormente (alegría, tristeza, temor, desagrado, furia), que a mi entender, más que manifestaciones, son reacciones físicas provocadas por los diferentes Estados Emocionales del Ser, como son la felicidad, la desdicha, la aprensión, la aversión y la violencia, tienen su origen en los primeros años de nuestra vida, donde aprendemos a comunicarnos por medio de nuestros sentidos externos, a través de las respuestas a los estímulos externos, los sensoriales, obviando y desatendiendo los sentidos y estímulos internos, los extrasensoriales, que son los que nos sirven de guía interior para cumplir nuestro cometido en cada vida o encarnación, como la intuición, el coraje o fortaleza interior, la sabiduría, compasión..., y sobre todo el amor, nuestro dador universal de dicha y bienestar. A estas ultimas las podemos llamar “revelaciones”, ya que dan paso a nuestro desarrollo evolutivo. 


Tanto las emociones como las revelaciones, se conjugan y actúan en mutua convivencia. Unas dan paso a las otras, y juntas hacen un trabajo verdaderamente excepcional en los seres humanos. Las emociones tratan de mantenerse equilibradas y ante cualquier desorden encienden una alarma solicitando ayuda para nivelarnos y salir adelante. Las revelaciones acuden, y afloran con más fuerza y determinación a mediana edad, cuando empezamos a despojarnos del disfraz o envoltura material, para descubrirnos y aceptarnos tal cual somos. 

Las emociones nos mantienen en un sube y baja, experimentando los opuestos, y buscando un termino medio donde podamos permanecer la mayor parte del tiempo en armonía. Las revelaciones vienen a mostrarnos ese punto medio, que se caracteriza por su serenidad y estado emocional de paz y gozo interior. 


Vayamos en pos de un proceso evolutivo menos traumático, doloroso y agotador, las emociones son la base y el comienzo, son una especie de detonante, pero no debemos permitir que se desborden y se nos salgan de control. 
Para evitar esto existen las revelaciones, están a nuestro servicio, prestémosle atención. Son las encargadas de equilibrar y nivelar las emociones, de ponerlo todo en su justo lugar, ellas son la solución a los desordenes mentales, mantienen estabilizados y en control los diferentes Estados Emocionales del Ser, y nos guían y ayudan a trascender. 

I. Harolina Payano T. Fluyendo armoniosamente. 

Pedimos excusas si alguna imagen usada tiene derecho de autor, al avisarnos la retiraremos.

martes, 11 de diciembre de 2018

Gotas de miel

Imagino que todos o casi todos conocemos la miel, ese preciado líquido viscoso, de un color exquisito, muy parecido al ámbar, y más que todo dulce, saludable y alimenticio. 
También supongo que saben que es producida por un insecto al que muchos le temen y otros desean mantenerlo lejos, hablamos de la abeja, pocos se le quieren acercar, ya saben por qué, pican y bastante dolorosa que es la picadura. 


Aunque es sumamente interesante y admirable la manera en que producen la miel y todo lo referente a ella y su colmena, ya que llevan un gran peso en el equilibrio del ecosistema con su arduo trabajo, no les hablaré de esto, se los dejo de tarea a aquellos que desconozcan su enorme labor, pero si les diré que se parece un poco a como funciona nuestra sociedad, ya que hay muchas obreras trabajando en equipo.

Para no perderme de la idea central de esta entrada, retomo la miel y su dulzura como un elemento muy necesario en nuestras relaciones diarias y en nuestro transitar. La vida mayormente nos da las cosas sin endulzar, y a veces resultan muy amargas, es nuestra tarea depositar unas cuantas gotas de miel en cada ocasión, relación, actuación..., en cada palabra pronunciada. 


No hablo de adular ni de ser hipócritas por conseguir favores y aprobaciones, eso seria endulzar con azúcar muy procesada y dañina, si no de ser sinceramente amables y condescendientes. A eso le llamo usar gotas de miel para endulzar la vida.

Cada vez mas estamos necesitados de esa miel, que disuelva o disimule la amargura que sentimos ante lo que nos rodea y ante las adversidades de la vida cotidiana. Estamos como predispuestos a encontrar el camino de la felicidad verdadera, nos gusta hacernos el sufrido y que nos tengan lástima. Si no es así, de que va tanto enfocarnos en los dramas, las catástrofes y los sufrimientos ajenos y propios, por qué no nos damos una dosis diaria de alegría, nos enfocamos en los buenos momentos, en la belleza que nos ofrece a diario la naturaleza, en lugar de resarcirnos con las tragedias humanas, de comentarlas una y otra vez. La negatividad pulula por todos los rincones del planeta, nos hemos encargado de ello.

Es como si en cada ocasión que la comentamos le diéramos un +, o un “me gusta” de esos que se acostumbra a dar en las redes, promovemos la maldad, las enfermedades y atrocidades sin saberlo. Con solo hablar y envolvernos en eso, al ver asiduamente esos sucesos y compartirlos, le estamos imprimiendo fuerza, energías poderosas de propagación, que al igual que los virus se instalan en nuestra mente y nos consumen lenta y cruelmente. Es como una fijación mental, donde quiera que te muevas y hay alguien contando sucesos trágicos, todos prestan atención, lo comentan y luego lo divulgan abiertamente.

El antídoto para esa corriente tan generalizada de convivir actualmente, son esas gotas de miel. Que se originan siendo objetivamente positivos, empáticos, no juzgando a la ligera, perdonando y generando nuevas oportunidades de entendimiento, de intercambio armonioso y crecimiento de afectos, ofreciendo apoyo y solidaridad emocional, en definitiva... amando.


Impregna de miel tus pensamientos y cada palabra destilará dulzura, transparencia y claridad, además de que como fabricante de miel, estarás contribuyendo con el ecosistema de la humanidad. No estoy hablando de negar la existencia de algo palpable, hablo de no darle mas fuerza de la necesaria poniendo sobre ella nuestras energías.

Hablo de pensar bien de la gente, de tener buenas intenciones con los demás, de no mentir ni fingir para ganar favores, de no sentir animadversión hacia alguien, por el simple hecho de pensar y tener creencias diferentes a las nuestras. Hablo de ver el lado bueno de la vida, que abunda más que el trágico y dramático.

Hablo de detenernos un momento y pensar antes de hablar o actuar, antes de dañar a alguien. Hablo de no seguir propiciando el mal promocionándolo. Por eso hago el llamado a usar a diario gotas de miel, endulzarnos la vida, hacerla mas ligera, con menos morbo insustancial, menos circo, y menos coliseo romano con sed de sangre. 

Es hora de sacudirnos toda esa influencia genealógica tan sangrienta y cruel de la raza humana, saquemos todo ese dolor letal que cargamos dentro generación tras generación, llegó la hora del cambio, de decirle adiós al sufrimiento y abrirle los brazos a una nueva era de alegría y amor. Liberemos de una vez por todas, ese karma dañino y enfermizo que alimentamos a diario. Salvemos nuestras almas de un mal mayor.

I. Harolina Payano T. Fluyendo armoniosamente. 

Esta entrada fue publicada en el periódico El Caribe:
https://issuu.com/elcaribe/docs/elcaribe20181215?e=1423128/63258659

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miércoles, 5 de diciembre de 2018

Parafraseando sobre la felicidad

Con una dedicatoria muy especial va esta reflexión para los amigos de Consciencia y Vida Magazine.

A pesar de todos los inconvenientes sufridos, en su afán por brindarnos su apoyo para mantener viva la comunidad Saliendo de la Matrix, se dejan sentir en la comunidad de cuando en cuando con una linda publicación, en la que siempre incluyen una bella imagen con una frase reconfortante.

En esta ocasión colocaron la siguiente imagen y frase, que además de gustarme ese “Desordenando la felicidad me encontré con la vida”, me inspiró a parafrasearla y acomodarla para sentirme totalmente identificada con ella.

La invertí y salió esto:
“Desordenando la vida, me encontré con la felicidad”




Si amigos, me parece que es lo que realmente he hecho de un tiempo acá, desordenar mi vida, romper poco a poco, ese orden algo rígido que me caracterizaba, y empezar a actuar con mas flexibilidad y consciencia de mi fuerza interior, con menos postura de obediencia a las reglas establecidas, y mas dejarme guiar por mi intuición y los deseos y anhelos de mi alma, esa que sabe bien lo que vine a hacer, y hasta cuando vence el plazo de postergarlo.

Ordenes y desordenes, se conjugan a diario para mantener un equilibrio perfecto en la vida, en el planeta y en todo el universo. La ley de los opuestos, “Ser y no Ser”.
 
La obediencia siempre ha sido bien vista, y la desobediencia no, lo mismo pasa con el orden y el desorden, pero saben qué, estos son fijados por parámetros rígidos, establecidos de generación en generación para un fin común, la supervivencia de la raza humana. En la actualidad, donde estamos despertando la consciencia, el desorden se hace imprescindible para reformar los nuevos límites que separan y diferencian a uno del otro.
 
El desorden puede ser tan toxico como liberador, es cuestión de perspectiva, de que tan arraigado tengamos los esquemas o que tan incómodos nos sentimos respecto a las imposiciones de la sociedad y los grupos sociales.   

PURO DESORDEN

Desorden / Orden. El resultado final de todo esto será un desorden ordenado, sí, organizado con consciencia, en el la inconsciencia no tendrá lugar, como tampoco lo tendrán el irrespeto y la desconsideración. 

DESORDEN ORDENADO

Llegan nuevos tiempos, y no hablo del famoso nuevo orden mundial, hablo de libertad emocional y espiritual, de soltar las ataduras que nos han impedido crecer. 
Atravesamos por un largo periodo de confusión y adaptación, pero la buena noticia es que estamos soltando el miedo, ese miedo que nos ha paralizado por siglos, de generación en generación, incrustado en nuestro ADN humano y en nuestros genes hereditarios, sin importar la raza ni el género.

Ese miedo que olvidamos en que momento de nuestra existencia nos fue infundado y por qué, hoy sabemos que por algún motivo tenemos que soltarlo ya, es hora de disolverlo y abrazar todo aquello que resuena en nuestros sentidos y nos ayudará a trascender. 

Son muchos los que han desordenado la felicidad y encontrado la vida, porque a veces simplemente creemos que somos felices si tenemos lo que supone nos debe proporcionar felicidad, pero resulta que esa aparente felicidad, nos roba la vida, y somos solo autómatas haciendo el papel de ser felices, pero estamos vacios de verdadera vida por dentro. 

Por otro lado son otros tantos los que han desordenado la vida y encontrado la felicidad, porque habían llevado una vida de resignación y sumisión, olvidándose de ellos mismos y de ser felices. 



Es como un juego, de letras o de domino, en el que entremezclas todas las fichas para escoger algunas y probar suerte.

O mas bien como un rompecabezas, en el que tienes un montón de piezas y de entrada no sabes por donde empezar, haces algunos intentos erróneos pero poco a poco vas colocando piezas y encajándolas y el paisaje empieza a cobrar forma y vida, y a tener sentido y belleza para ti. 


La felicidad no es un destino, es más bien un trayecto, un disfrute. El goce de descubrir y descubrirte, de probar y saborear la vida, de ordenar y desordenar, para darnos cuenta de la magia que nos ofrece respirar, reír, caminar..., amar. 

    
I. Harolina Payano T. Fluyendo armoniosamente. 

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